Para conseguir que nuestra casa de madera posea una larga durabilidad es necesario realizar una serie de tareas de mantenimiento para que nuestra construcción se mantenga intacta como el primer día tras su instalación. Por ello, es necesario realizar estos trabajos de mantenimiento de forma periódica para asegurar que la madera esté protegida del sol, el agua e insectos que pueden deteriorar la construcción.
Por ello, te resolvemos las principales dudas que surgen en cuanto al mantenimiento de las viviendas de madera.
¿Qué insectos pueden dañar la madera y qué tratamiento existen?
Las termitas son los insectos que mayor daño provocan a la madera ya que son detectados cuando la probabilidad de solución es baja, siendo además el número de individuos que intervienen muy elevado. Suelen proliferar en ambientes húmedos y sin ventilación.
Otro de los insectos que se ven implicados en el deterioro de la madera son las larvas Carcoma, las cuales digieren una gran cantidad de madera. Su detección es complicada ya que comienzan desde dentro hasta el exterior de la madera.
El taladro de la madera (Hylotrupes bajulus) es conocido ya que deposita los huevos en las grietas de la madera, siendo la larva la que se alimenta de la madera.
La larva del gorgojo posee un comportamiento similar a la del taladro de la madera, siendo una de las principales diferencias el estado en el que se encuentra la madera, generalmente podrida y húmeda.
Las avispas de la madera es otro de los insectos que dañan la madera puesto que, junto con la ayuda de los hongos, deterioran la madera con gran facilidad.
En cuanto a los tratamientos, éstos dependen del insecto que está implicado, así como su efecto (tamaño del agujero, tipos de restos, larvas, etc.) y la extensión de madera afectada.
En el caso de que el área afectada esté localizada, el tratamiento puede realizarse de forma superficial o a presión, donde se inyecta el líquido impidiendo que salga.
Por el contrario, cuando la infestación es generalizada, es necesario recurrir a la fumigación, siendo un método más agresivo y costoso.
¿Qué otras tareas hay que hacer?
Para que la madera esté lo menos dañada posible es necesario dedicar especial atención a la limpieza de ésta. De este modo, hay que evitar que los restos de polvo o polen.
